El concejal de ACPC se acercó hasta la tratadora de residuos para denunciar la falta de supervisión estatal en sus procesos de biodegradación. Vecinos denuncian la contaminación de las napas de aguas y afluentes cercanos.
Una situación que ya no puede sostenerse. Esa es la premisa que levanta el concejal de Primero Campana en el Frente Renovador, Carlos Cazador, a la hora de hablar sobre la empresa LandNort y la polémica continuidad de sus operaciones. En las últimas semanas, se han repetido las denuncias sobre la contaminación en las aguas producida por la compañía de landfarming, por lo que el edil se acercó hasta el lugar para difundir el reclamo ante los medios.
"La verdad que este es un sitio al que no nos gusta venir. Estamos acá y ustedes pueden sentir el olor a podrido que hay. Cuando el viento sopla fuerte, los vecinos de Otamendi y Las Praderas me dicen que el aire se vuelve irrespirable. Barrios en donde hay escuelas y jardines", comenzó diciendo el concejal.
LandNort es un tratador de residuos que utiliza el método landfarming de biodegradación asistida. Es un proceso ya obsoleto en el mundo porque es muy difícil de controlar, si no se tienen sumos recaudos es fácil que diversos contaminantes se filtren hacia las napas de agua y afluentes cercanos.
Su llegada a Campana generó polémica:previamente, había intentado radicarse en la localidad de Torres, pero una pueblada evitó que eso sucediera.
"Nosotros hemos solicitado innumerables pedidos de informe sobre la empresa y sus procesos, pero no nos ha llegado ninguno. La intendente dijo hace unos años que cerraba LandNort, pero pareció más un anuncio al aire que una medida real, ya que solo la OPDS puede clausurar una empresa de tercera categoría como esta", rememoró Cazador.
"La Sub-Secretaria de Medio Ambiente brilla por su ausencia. Acá se tendrían que realizar análisis sobre la contaminación producida en aire, tierra y aguas. Si los resultados de esos análisis dieran mal, se eleva el caso a la OPDS y la entidad no puede mirar para otro lado, tiene que aplicar la ley y cerrar LandNort. Bueno, nada de eso está sucediendo", agregó.
Mientras el edil dialogaba con la prensa, ejecutivos y hasta uno de los propios dueños de la empresa se acercaron a ofrecer asistencia para despejar las acusaciones en su contra. Sin embargo, Cazador insistió en que las muestras y los análisis deben ser realizados por la Municipalidad y no por los propios denunciados.
"Yo vine hace muchos años y pude ver el proceso de cerca, me mostraron los indicadores, etc. Todo muy lindo, y me parece bárbaro y necesario que la empresa supervise su propio impacto ambiental. Pero el auténtico control lo tiene que hacer el Estado", sostuvo.
Finalmente, Cazador concluyó: "Más allá de estas irregularidades y de la ausencia total de la Sub-Secretaria de Medio Ambiente en el control de entidades como esta, yo estoy absolutamente en contra del landfarming y sostengo que LandNort debe ser erradica de Campana. La ciudad está de por si contaminada por la presencia de numerosas empresas. ¿Es necesario que tengamos que sumarle el malfuncionamiento de los tratadores de residuos?".
