El escepticismo, realismo u oportunismo de la semana que dejamos atrás marcó un nuevo ascenso récord del dólar pre-electoral -que superó los $81 en el mercado de futuros para fin de este año, inspirando posibles nuevas medidas de controles o desdoblamientos cambiarios-, y una abrupta caída de las reservas del Banco Central en tandem -que solo en esta semana cayeron por USD -4.000 millones, y desde las PASO lo hicieron en unos USD -23.000 millones aproximadamente.
Siempre feroces los mercados, no se vislumbran tiempos sencillos para el nuevo equipo económico de gobierno. Confiamos en las pericias técnicas y políticas de gestiones como las que puede encabezar Alberto Fernández. Preferimos que los sacudones al status quo provengan de las demandas sociales y no de la impaciencia financiera y las burbujas de precios. Que las demandas sociales no sean reprimidas.
Queda un camino largo por transitar. Las economías se mueven en ciclos, y por lo general los países de la región latinoamericana comparten ciclos de expansión y de contracción económica. Es decir, en cierta forma, obligadamente, la salida es regional. A modo de tomar perspectiva presentamos un resúmen de datos económicos que grafican el muy buen ciclio que finalizó en 2011, el otro más débil el que concluyó en 2015 y el desastre económico de los últimos cuatro años de gobierno.