Campana ha crecido notablemente, al calor del crecimiento y el desarrollo de la Argentina bajo la conducción de Cristina Kirchner.
El parque automotor local es uno de los más importantes de la provincia de Buenos Aires en términos relativos, y supera la media en patentamientos a nivel regional. Esto significa un aumento considerable del flujo vehicular (autos y ciclomotores), notándose sin embargo un déficit en la colocación de semáforos, siendo las intersecciones de la ex Avenida Rivadavia con la calle Estrada y con la calle Jean Jaures, cruces muy peligrosos, donde regularmente ocurren accidentes.
En la avenida Varela, ex Rivadavia, hace mucho tiempo no se ha puesto ningún semáforo. Esto demuestra la falta de planificación del municipio, teniendo en cuenta el potencial crecimiento del parque automotor, como continuación del proceso actual en el rubro.
Los distintos boulevares (Sarmiento y Dellepiane), presentan también puntos de alta concentración vehicular, sin que existan semáforos, siendo un cruce peligroso el de Sarmiento y Jean Jaures, como también Bertolini y Sarmiento, dada la gran cantidad de vehículos que acceden a la Universidad de Luján.
Un caso particular es la Av. Rocca, tradicionalmente denominada Real, de alta concentración vehicular al ser la calle en donde se concentran la mayoría de los comercios campanenses.
Podríamos analizar decenas de cruces y esquinas complejas, siendo necesaria una fuerte inversión pública en semáforos en nuestra ciudad, como una forma de mejorar el tránsito de la misma y la calidad de vida.
