Las 328 piezas pesan más de 2395,5 kilos y están valuados en más de 1 millón de dólares. Los meteoritos son considerados bienes culturales por lo que no se pueden exportar.
Por disposición de la Justicia Federal de Campana, la Aduana local entregó al Instituto de Geología y Recursos Minerales (SEGEMAR) una serie de restos de un meteorito que habían sido secuestrados cuando se los intentaba sacar del país.
El secuestro se había realizado el 21 de enero de 2012, cuando personal de la Aduana de Campana detectó 328 piezas de meteorito que estaban siendo trasladadas por un remolcador ("Papu Nort") sobre barcazas y que tenían como destino una dirección en California, Estados Unidos. El material pretendía ser sacado del país como mercadería varia, pero al ser pasado por el escáner se advirtió que había algo raro por lo que se procedió a abrir el mismo y a su secuestro.
"En la causa se logró determinar que estos restos venían de meteoritos que cayeron hace millones de años en lo que se conoce como Campo del Cielo, una zona ubicada entre Chaco y Santiago del Estero", explicó el doctor Juan María Romero, abogado de la Aduana Campana. Los meteoritos se consideran bienes culturales por lo que su exportación esta totalmente prohibida por ley.
Las 328 piezas pesan más de 2395,5 kilos y están valuados en más de 1 millón de dólares.
"Se trata de material de importante valor económico, pero también científico y didáctico siendo de gran utilidad su protección y conservación tanto para la comunidad científica como para la población en general", agregó Romero quien encabezó el acto de entrega formal del material al SEGEMAR, que estuvo representado por el doctor Eduardo Zappettini, director de recursos Geológicos-Mineros del organismo nacional. "Parte de este material ira a investigación y otra parte será para exhibición", precisó Zappettini sobre el destino de los restos.
El contador Horacio Font y el doctor Juan Romero de la Aduana Campana al momento de la entrega del material.
La perra "Lola" en acción, controlando los tachos donde estaban los restos.
Uno de los pedazos de meteorito secuestrados por la Aduana local.