Sr. Director
De mi mayor consideración.
Solicito a Ud. la publicación del siguiente artículo.
Sin otro particular, saludo a Ud. muy atte.
ETICA, CULTURA Y FORMACIÓN PARA EL TRABAJO
Hoy muchas personas de nuestra sociedad que no tienen ni educación ni moral, esencial para la convivencia ciudadana, de paz y solidaridad, donde no tienen nada que ver las distintas creencias religiosas, políticas o culturales.
Pero todo esto tiene una raíz, la falta de formación familiar o la despreocupación de lo que realizan sus hijos menores de edad o en su adolescencia. Esto significa además la no formación ética de los adultos, que no importa el nivel de pobreza, ya que si sus mayores le enseñan de muy chicos el camino correcto, éstos obrarán de otra forma cuando sean adolescentes.
Actualmente, son muchos los menores de edad que pululan las calles a altas horas de la madrugada, tomando bebidas alcohólicas y algo más, que los incita a realizar desmanes, robos o destrozos de la propiedad privada.
Además los saqueos y matanzas que realizan los motochorros, que más está decir, cada día son más.
Ahora bien, quien controla esto, si por ejemplo hay barrios donde no hay ninguna vigilancia, para poder remediar esto, por lo menos para disminuir estos delitos, para proteger a las personas que trabajan, que pagan sus altos impuestos, para qué, para tener los servicios esenciales y la seguridad.
Además los vecinos, los trabajadores que actualmente están expuestos a otro tipo de inseguridad, la inflación desmedida, que día a día paga más sus servicios, comestibles y descuento indebido de su sueldo o jornal. Otros, los jubilados que cobran lo mínimo, ganan menos que los que reciben gratuitamente dinero sin trabajar, (exceptuando a aquellos que realmente lo necesitan).
La inseguridad viene del disconformismo, el resentimiento de no lograr lo que otros poseen, ya que no han tenido la posibilidad de educarse de formarse para el trabajo, o que no quieren ninguna de las dos. Pero el fondo de todo esto está en la formación familiar o sea la ética.
En definitiva ese es el déficit de algunos de nuestros ciudadanos, que para corregir esto todos debemos colaborar, aunque va a costar mucho.
La bebida y las drogas también son una causa muy importante que encaminan a un individuo a delinquir.
Lo que los argentinos de bien, que trabajamos que formamos, queremos un país solidario, de progreso ya que tenemos un territorio que muchos envidian por su grandeza y posibilidades inimaginables.
Miguel Angel Dipaola
DNI. 5.607.879