Especial para La Auténtica Defensa
Entre penas y alegrías ha pasado el campeonato mundial de fútbol 2014 dejándonos saborear de alguna manera y en lo deportivo la derrota y el exito . Todos los ciudadanos pensábamos como afrontaríamos la realidad del país el día después, y ese día llegó. Juntamente con la llegada de la selección de futbol al país enarbolando el título de sub campeones del mundo llega por un lado la alegría y el deseo de seguir festejando con orgullo la capacidad deportiva de los compatriotas y por el otro el despertar a una realidad para nada compatible con el clima de fiesta vivido en el transcurso del evento.
La economía micro y macro del país dando indicios de debacle, la política agentina dando, como viene sucediendo casi cotidianamente evidencias de escandalosos desmanejos y de impunidad a la hora de ser sus protagonistas investigados por la justicia, una justicia que ha dejado de ser tal y mucho menos independiente. Los pésimos ejemplos exibidos desde los sectores de poder están socavando los principios éticos y morales de gran parte de la sociedad la cual evidencia cada día comportamientos que alteran las más elementales normas de convivencia.
De no ser así como se explican los incalificables desmanes producidos en inmediaciones del obelisco por personas autoconvocadas cuyo fin inmediato era el de realizar un gran festejo con tintes casi patrióticos. Nada hacía suponer tamaña batalla campal entre la gente allí reunida la policía federal y metropolitana. Episodios similares se fueron dando casi al unísono con los de Bs. As en otras partes del país. Sin lugar a dudas ese sector social que cree que es impune y que por lo tanto su accionar violento nadie sancionará , es el resultado de un trabajo lento pero constante de clubes de futbol que apañan a sus barras, desindicatosque crean verdaderas fuerzas de choque y de sectores políticos que también reclutan personas que son utilizadas para mostrar presencia y poder a cambio de los mal denominados planes sociales .
Yo le preguntaría a esas personas que se siente cometiendo todo tipo de delitos a la vista de todos, enfrentando a las fuerzas del orden con una osadía sin igual, dañando la propiedad pública y privada . Es posible que nadie pueda o quiera responder a estas preguntas, mucho menos si se encuentran bajo el efecto inhibitorio de la droga o el alcohol.
El facilismo y la exclusión hacen estragos en los tejidos sociales y estos eventos serán cada vez más frecuentes y violentos si no se comienza ahora a revertir esta realidad desde la familia, la escuela, la iglesia, la política, los clubes etc. Sé qué sienten estos violentos al producir estos desmanes….satisfacción y la liberación de tenciones largamente acumuladas. El resto de la sociedad que quiere vivir de otra manera y se encuentra desprotegida ante el avance de la violencia social siente que quiere volver a vivir en una sociedad con valores y principios.Será esto posible ? en el corto plazo, claro que no, seguramente deberá pasar toda una generación para que esto cambie.