¿Te acordás que hace un tiempo te dije que te iba a pedir que me dieras una oportunidad para conducir los destinos de esta ciudad? Bueno, llegó la hora. NECESITAMOS UN CAMBIO. Vos lo sabés mejor que nadie, cada día que pasa la realidad te convence de que así no se puede seguir. Por eso te digo: YO ESTOY. Quiero cambiar las cosas. Pero fundamentalmente, creo que se pueden cambiar las cosas. Y que EL MOMENTO ES AHORA.
Sin embargo, antes es necesario que derribemos juntos cuatro mitos. Una serie de velos que ocultan la verdad de la política local, que tienden a naturalizar lo que no es otra cosa que una cuestión transitoria y modificable.
El primero, el que tal vez ya estás pensando, es: "Cazador, usted habla, discute, incluso lo he visto enojado y gritando, pero nunca hace nada". Es verdad: no he hecho todo lo que he deseado hacer por mi ciudad. A lo largo de mi carrera política he sumado logros y satisfacciones, pero más fueron las desilusiones y los proyectos truncos. ¿Por qué? PORQUE TODA MI VIDA POLÍTICA HE SIDO UN CONCEJAL. JAMAS OCUPÉ UN CARGO EJECUTIVO.
Nunca tuve la chance de obrar. Lo mío ha sido una ardua tarea de observación y diálogo con los vecinos, elaboración de proyectos y debates en el HCD. Mi lugar me ha obligado siempre a depender del acompañamiento de las mayorías circunstanciales, que con su voto aprueban o no las diversas presentaciones. Pero no solo eso: después viene la evaluación final del intendente de turno, que decide si aplica o no lo aprobado por el HCD.
En una columna anterior expuse el rol del concejal, pero me parece oportuno volver a aclararlo. Desde mi banca yo no puedo resolver los problemas de fondo de Campana. Es imposible, no tengo el poder que se necesita para hacerlo. El poder que si tiene el intendente, por lo que no puede hacerse el distraído, debiendo asumir la responsabilidad por los problemas que tiene la ciudad.
El segundo de los malentendidos radica opinión de que no tengo un plan, de que hablo pero sin ninguna idea detrás. ¿Cuántos proyectos he presentado? ¿Cuántos has leído explicados aquí? No quiero explayarme en este punto demasiado, porque de todos es el menos cierto: si hay algo que nos ha caracterizado a los concejales de Primero Campana, es la propuesta de ideas permanente. Algunas buscando solucionar problemas en concreto, otras persiguiendo objetivos transformadores o de largo plazo. Pero siempre hemos redactado, levantado la mano, votado a favor y en contra.
Conocés mi voz. ¿Conocés las de todos los demás candidatos?
El tercero de los mitos es el que sostiene que yo estoy solo, que no tengo equipo. Mentira. Desde hace muchos años me acompaña gente honesta, con el mismo amor por Campana. Militantes de Primero Campana pero también profesionales y técnicos sin color político alguno que están dispuestos a trabajar por su ciudad, para resolverle los problemas a la gente. Por supuesto, siguiendo las líneas democráticas de nuestro espacio vecinal, convoco hoy, como lo haré el día que seamos gobierno, al resto de las fuerzas políticas y a todos los vecinos de Campana a trabajar en conjunto. PORQUE SOLO UNIDOS VAMOS A SUPERAR LOS DESAFÍOS QUE NOS TOCA ENFRENTAR.
El último mito, con el que quiero cerrar, refiere a la historia. A una constante que vengo escuchando hace rato, pero no solamente con este gobierno en el poder, sino también con el anterior, el de don Calixto. Debe ser algo propio de los oficialismo que se perpetúan -con el voto de la gente, claro está- en el poder. "Solo el peronismo puede gobernar la ciudad", es la frase cabecera de esta forma de pensar.
Como dije, hace 30 años, la palabras eran "solo Dellepiane puede mandar en Campana". Las recuerdo como si fuera ayer. Pero esto es falso, de otra forma el joven Varela de principios de los ´90 no podría haberse plantado como se plantó y ganado el sillón de la intendencia. Ni tampoco en su momento Dellepiane. Pensar que solo el que está al mando puede hacerlo es quitarle el protagonismo al verdadero artífice del poder. Los vecinos son el soberano. El que ocupa la Municipalidad es solo un representante de la voluntad popular, que hoy está pero mañana puede que no.
En aquel entonces, cuando el justicialismo se hizo con la intendencia de Campana, había enfrente una gestión que no tenía más para dar. Ahora LA HISTORIA SE REPITE. El Frente para la Victoria dio lo que tenía que dar. Poco o no, lo juzgaremos a la larga. En cambio, el presente es tirano y nos devuelve la imagen de una ciudad ARRODILLADA ANTE LOS DELINCUENTES, rendida ante la falta de oportunidades para sus jóvenes, penando la carencia de obra pública básica en sus diferentes barrios.
Una ciudad cuyos vecinos están cansados, quieren un CAMBIO, y de a poco se están dando cuenta que tienen las herramientas para hacerlo posible: CORAJE Y DECISIÓN.
El resto es meter una boleta en la urna. Un trámite de domingo, para el cual falta mucho. HASTA ENTONCES, A SEGUIR TRABAJANDO POR LA CAMPANA QUE QUEREMOS. YO ESTOY PARA QUE LO HAGAMOS JUNTOS.
Un fuerte abrazo,
Carlos Cazador
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