A Rubén Del Re (QEPD), le cabe también perfectamente este versículo. "Acordaos de vuestros pastores, que os hablaron la Palabra de Dios; y considerad cuál haya sido el resultado de su conducta, e imitad su fe" (Hebreos 13:7).
El 14 de Octubre de 1984, hace 31 años, un referente de Campana, se paró en Santa Fe, e impactó para siempre con un mensaje que aún hoy resuena en el ámbito evangélico: ¡AHORA VOS!. ¡Ese era nuestro Rubén!.
Se trataba y sigue siendo un mensaje de desafío a tomar la posta, a las nuevas generaciones, de jóvenes y jóvenes adultos. Para ser factor de cambio en la iglesia, en la familia, en su grupo de influencia, y en la sociedad en que vive. Habló del profeta Elías y su discípulo Eliseo, cuando lo estaba alentando a recibir su manto, como símbolo de sucesión en la tarea encomendada ante Dios.
El 13 de Nov. 1989 dentro de pocos días serán 26 años que partió a la presencia del Señor, a los 57 años, mientras participaba de una multitudinaria conferencia evangélica en la ciudad de Mar del Plata.
Era una persona de personalidad avasalladora, muy querible por nosotros y en toda la comunidad de Campana. Su vida pública se caracterizó por una entrega sin reservas al servicio de Dios y del bien espiritual del prójimo, especialmente de los niños y jóvenes.
Viajero incansable, recorrió buena parte del mundo con su esperanzado mensaje y el fin de su vida lo encontró en lo que fue su vocación y motivación suprema al servicio de Dios, al igual que su padre el Pastor Don Floro Del Re. Dejó una familia que sigue siendo de bendición y el mejor recuerdo en quienes lo conocimos, derrochaba simpatía, por eso cosechaba amigos a granel, siempre aparece alguien que nombra a Rubén y hace referencia de él como quien le recuerda con aprecio y como que marcó su vida en algo, y por eso está presente en su memoria.
Su extraordinaria obra de amor y servicio, queda en miles de niños que encontraron en Jesucristo su esperanza y en centenares de jóvenes que quisieron seguir su ejemplo, y en el pueblo evangélico que agradece a Dios por esa vida, que fue un gran testimonio de los valores cristianos para formación en la niñez y juventud.
Fue Director Nacional de LAPEN (Liga Argentina Para la Evangelización del Niño), su personalidad magnética e intensamente cristiana, condujeron a que la entidad trascendiera en medio de toda la Iglesia Evangélica Argentina que crecía considerablemente en las décadas del ´70 y ´80. Allí nace también LAGRAM dedicada más a la adolescencia y juventud. Rubén fue una excelente persona, alguien "muy especial", que junto a su esposa Nelly, alentaron y fueron de inspiración a muchos jóvenes y matrimonios jóvenes, en la tarea de impartir la Visión de Dios de que "no se pierda ni uno de estos pequeños". (Mt. 18:14) Nos queda a nosotros seguir la obra que realizó Rubén, tomar la posta (que hablara en ese mensaje) para ser de influencia, y que siga creciendo la Fe en Jesucristo, y la familia de Dios, en Campana, en nuestro país y en el mundo.
Tarde o temprano todos tenemos que seguir el legado que nos dejan nuestros mayores, y asumir la responsabilidad de transmitir los valores de Dios para nosotros y los que nos rodean, si lo hacemos, será de bendición para muchos. (Gal 6:10)Busque una Iglesia donde se predique a Cristo y La Biblia, "La Palabra de Dios"
¡Hasta la próxima semana! ¡Dios le bendiga!
Luís Rodas
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