Convencido de que la ciudad tiene un potencial enorme, una buena base a partir de la cual puede continuar creciendo hasta ser una de las mejores urbes del país, segura, moderna e inclusiva, donde los servicios lleguen cada vez a más barrios y los delincuentes a cada vez menos hogares.
Convencido de que los vecinos son la materia prima de esa gran transformación que nos espera, porque sin su fuerza de voluntad, sin sus ganas de mejorar, de llevar a Campana al lugar que se merece, sería imposible soñar con la ciudad que deseamos ver algún día hecha en realidad.
Convencido en que los campanenses, que con el sudor de su frente pagan los impuestos municipales mes a mes, merecen tener una prestación de agua potable y cloacas acorde a sus derechos. Convencido de que ABSA se tiene que ir o hay que hacerla ir.
Convencido de que las calles deben estar aptas para ser transitadas por autos, motos, los móviles de Bomberos y las ambulancias, si el riesgo de quedarse atascado en cualquier esquina. Convencido de que debe haber una cuadrilla municipal recorriendo los barrios los 365 días del año, rastreando pozos, zanjas tapadas y sumideros obstruidos y procediendo con una rápida resolución.
Convencido que las grandes obras son necesarias y bienvenidas, pero que no se puede dejar a la buena de Dios el mantenimiento cotidiano de la ciudad. Convencido de que para el vecino es importantísimo que su barrio este limpio, con los pastos cortos y las luminarias en funcionamiento.
Convencido que la Policía debe comprometerse con la estrategia de seguridad desplegada por el Municipio, y que una articulación de fuerzas vivas de la ciudad, supervisada desde el Consejo de Seguridad Municipal, es la mejor opción para acabar con el delito.
Convencido que los trabajadores municipales deben ganar un salario competitivo, como es su derecho. Convencido de que, si queremos una Municipalidad más abierta al vecino y sus necesidades, necesitamos personal público bien remunera, capacitado y premiado.
Convencido de que este Gobierno necesitaba crédito durante su primer año de gestión para cumplir sus objetivos de campaña, pero que a partir de ahora hay que empezar a demostrar si realmente se está a la altura del desafío Campana.
Convencido también de que la oposición a una gestión municipal se debe hacer con responsabilidad y, sobre todo, coherencia. Convencido de que en el HCD hay oportunistas que hoy dicen lo que callaron por años, que ahora critican lo que aplaudieron en toda una era.
Convencido de que el vecinalismo y especialmente Primero Campana tiene soluciones para los problemas que afronta la ciudad. Convencido de que no se trata de soberbia: es el resultado de años y años caminando cada rincón de Campana, dialogando con cada uno de sus vecinos, conociendo cómo piensa el del barrio San Felipe, el de Las Praderas, el del Centro y el de Los Pioneros. Convencido que podemos hemos podido llevar su voz al HCD. Convencido que tenemos pilas para seguir haciéndolo mucho tiempo más.
Convencido que nuestro amor por Campana es grande. Grandísimo.
Convencido de Primero Campana. Convencido de que nuestro compromiso es con vos.
Un fuerte abrazo,
Carlos Cazador