En el marco de la iniciativa "Territorios de Colaboración - Pedagogía de lo Anegado", este viernes y sábado pasados, se llevaron a cabo dos jornadas de investigación en la zona insular de Campana, con la propuesta "Cuerpo o Territorio. Entre Horizontes posibles".
Dos jornadas, con diversas actividades coordinadas por el fotógrafo e investigador local Matías Barutta (Proyecto Delta), cuya propuesta fue la de dar a conocer las perspectivas de diversos actores que influyen sobre el territorio del Delta de Campana, abarcando desde instituciones público/privadas hasta la comunidad local, con el fin de abrir el debate sobre el devenir de sus islas, contemplando desde la actual lógica forestal predominante hacia la incipiente apertura turística que se proyecta.
Esta actividad -realizada como una de las etapas del proyecto "La Tierra NØ Resistirá", un proceso de investigación, exhibición internacional y foro público cuyos resultados se presentarán en el mes de marzo 2019 en el Centro Cultural Parque de España de Rosario- se sustentó bajo interrogantes como: ¿qué sucede con el desarrollo de la comunidad isleña local, su patrimonio cultural y su vínculo con el continente entre estos polos de crecimiento posibles? ¿Podemos aún hablar de un cuerpo con tejido social más allá de una amplia frontera territorial donde todo pareciera posible? ¿Quién diseña el territorio y para quienes?
Dentro del universo que plantea la iniciativa Territorios de Colaboración -proyecto de la asociación Casa Río en el marco del Programa Humedales Sin Fronteras, un programa a diez años que nace desde los pueblos del sistema de humedales de los Ríos Paraguay-Paraná-, participan investigadores-artistas junto a personas y organizaciones que habitan o trabajan en el delta del Paraná y la franja costera sur del Río de la Plata, como parte de un acercamiento que pretende proyectar estos interrogantes; preguntas que expandan los horizontes de comprensión sobre la riqueza de estos vastos ecosistemas y la simbiosis entre los seres vivos que los habitan.
Particularmente durante la jornada del viernes, se realizó una deriva investigativa por los bordes del territorio y las entrañas de su cuerpo, a través de una primera visita al Parque Nacional Ciervo de los Pantanos, para luego cruzar el río Paraná hacia la Estación Experimental Delta INTA como segunda posta de esta deriva. Después de atravesar caminos de tierra por kilómetros isla adentro, se arribó a la sede de la Asociación Civil Isleños unidos II, para culminar en el mítico Recreo Blondeau, patrimonio histórico negado de nuestra ciudad. El día sábado por la mañana se montó una radio abierta en el salón de baile del recreo, invitando a la comunidad local a contar sus sentires en torno al devenir del sector, con el foco puesto en la supervivencia de un espacio como el recreo Blondeau frente a la dinámica extractivista.
"¿Cuánto puede aguantar este cuerpo? Pareciera que como humanidad no se nos ocurre otra cosa más que urbanizarlo. El delta no solo es nuestro pulmón verde sino también una gran esponja, cuya degradación se evidencia en un presente plagado de catástrofes naturales vinculadas al agua o a su carencia. ¿Por qué seguir alterándolo? ¿En beneficio de quién?", comenta Barutta en función a algunos de los tantos interrogantes que se plasmaron en estas jornadas de investigación para sentir al delta y que seguirán haciendo mella en nuestros corazones.
Grupo de trabajo que conformó la deriva investigativa, constituido por integrantes de diversas organizaciones como Casa Río, Taller Flotante, M7Red, Proyecto Delta, Farn y autoridades del Parque Nacional Ciervo de los Pantanos.
Radio isleña transmitiendo desde el salón de baile del recreo Blondeau.