La situación volverá a agosto, por lo que, por ejemplo, no habrá concentraciones.
La segunda ola de contagios de coronavirus y el aumento de positivos en el fútbol argentino, con grandes brotes en Banfield e Independiente en las últimas horas, llevó a la Asociación del Fútbol Argentino (AFA) a volver atrás con la flexibilización de los protocolos sanitarios. Así, la situación se retrotraerá a agosto pasado, por lo que habrá más controles, los futbolistas tendrán que trasladarse en autos particulares y se prohibirán las concentraciones.
En su página web, la AFA publicó un comunicado en el que expresó "su profunda preocupación en atención a la cantidad creciente de casos de Covid 19, tanto en la sociedad como en los diferentes equipos de nuestro fútbol", por lo que "en consonancia con los lineamientos de la política sanitaria llevada adelante por el Gobierno Nacional, esta asociación insta a los clubes, jugadores y jugadoras, miembros de las instituciones y a toda la familia del fútbol en general, a cumplir de forma estricta con los protocolos sanitarios oportunamente aprobados".
Además, la AFA adelantó que, "en los próximos días, realizará inspecciones para corroborar el exhaustivo cumplimiento de todas las medidas" y que, de no cumplirse las mismas, "se elevará un informe al Tribunal de Disciplina a fin de que obre conforme su competencia".
Así, los jugadores deberán presentarse en los entrenamientos por sus propios medios y tras la práctica no se bañarán en el club, sino que lo harán en sus casas al regreso. Del mismo modo, a la hora de los partidos. Tampoco estarán permitidas las concentraciones de los jugadores antes de los partidos. La excepción, claro está, será la de los alojamientos en hoteles en aquellos encuentros que requieran viajes.
UN BROTE DE CASOS EN INDPENDIENTE AFECTÓ A SU DT, JULIO CÉSAR FALCIONI.