Opiniones ciudadanas
Estafas con tarjetas de crédito. Usuarios prisioneros de la red. Hay que revisar la ley de Entidades Financieras y de Tarjetas de Crédito.
Últimamente florecieron las acciones de uso por terceras personas no autorizadas de las tarjetas de crédito que tan promiscuamente y fácilmente entregan las "Instituciones Bancarias". Excelente negocio para ellos, ya que podemos decir que van a "riesgo nulo". Los inocentes usuarios, no obstante aunque analizaban los altos intereses en las financiaciones que tenían las tomaban, y allí comenzaban los dolores de cabeza. Pues ni las tarjetas ni los bancos se inmiscuían en el uso indebido de las mismas por terceros no autorizados. Las instituciones bancarias, ente algún reclamo dicen: -"debe dirigirse a la Marca (de la tarjeta) Emisora. Pronta respuesta del usuario titular: "pero ustedes me la dieron. La tomé por su intermedio". - Si, pero los reclamos deben dirigirlos a la marca "Emisora". Detrás tiene los números telefónicos, incluso un 0810 (que nunca te puedes comunicar por su intermedio.) Usuario: -Ya llamé y no me puedo comunicar. Banco: - Insista. Aclaro algo, estoy hablando de una "Marca" que debe tener millones de usuarios en Argentina solamente.
Podría seguir con este diálogo como se diría "hasta que las velas no ardan". Y en este punto, retorno a mi domicilio rumiando el freno, y continúo el paso que había abandonado, pidiendo ayuda a alguien más joven de las nuevas generaciones de informática.
La "Marca Emisora" está dirigida por una computadora, que se encuentra cargada con un sinnúmero de preguntas, respuestas y formularios, "ayudas de WhatsApp" con contestaciones grabadas para reconocimiento de preguntas, etc., con la cual es imposible entablar un diálogo; formularios que aparecen cuando quieren, y se borran cuando están preparados para hacerlo. ¿Eso es un Servicio? Toda la comunicación que se recibe es de ventas promocionales y/o las liquidaciones. Hay bancos que descuentan las tarjetas "cuando hay plata en la cuenta", aunque no sea todavía el vencimiento. Se estarían aceptando ventas de servicios por internet con el nombre del titular, con el número de documento (que figura en cualquier padrón) y el número de seguridad de la fotocopia de una tarjeta.
Cuando a usted le dan una tarjeta le piden casi hasta la Partida de Nacimiento de sus hijos. Cuando compra por Internet son suficientes los datos que enumeré en el párrafo anterior. Y los problemas son del titular de la tarjeta, dado que tiene que demostrar que él no hizo esa compra. Y empieza la calesita.
Crecen por cientos y miles diariamente las nuevas tarjetas de crédito emitidas. Me parece que nos estamos olvidando a quién se debe proteger y quienes son los delincuentes. ¿O hay algo que me perdí y hay algún negocio nuevo comercial - financiero? Dicen que no hay que comprar monedas fuertes o cibernéticas. ¿Quieren seguir creando una nueva casta de delincuentes para pudrir definitivamente la economía mundial? Nosotros, los argentinos, no podemos luchar tecnológicamente para solucionar estos problemas, pero sí podemos generar una legislación que proteja los intereses del pueblo soberano, formado por los humildes, los trabajadores y los empresarios que creen y luchan por un país productivo, tratando de crear la fuerza de trabajo que se necesita para volver a tener el lugar que teníamos en la comunidad internacional. Legisladores de todos los Partidos Políticos, ustedes tienen la palabra por voluntad del Pueblo Soberano que los votó. No fallen. El país está en sus manos. A esta altura, más que el pueblo, quienes los juzgarán serán sus ancestros, sus hijos, y los hijos de sus hijos.-