Opiniones Ciudadanas
Prevención del delito en la propiedad horizontal. Recomendaciones generales sobre medidas a tomar. Nota 1.
Dados los continuos delitos contra la propiedad horizontal, que actualmente se han incrementado en nuestra ciudad, se buscó realizar un estudio sobre la forma de asesorar a los usuarios y por ende a los Administradores de Consorcios, sobre la mejor forma de poder lograr entorpecer a quienes tomaron este tipo de robo como delito, y así mejorar la calidad de vida de los usuarios de unidades habitacionales de estas características y por ende la de nuestra Comunidad.
El tipo y cantidad de delitos que se ven cometer diariamente, implica la imposibilidad de realizar el desarrollo de cómo prevenir los mismos en una sola nota, por lo cual esta es la primera de ellas, dejando constancia que no se va a terminar, pero se considera que pueden llegar a prevenirse muchos de ellos.
La psicosis producida por la cotidianeidad, hace que se forme un malestar que implica incluso acrecentar el peligro sobre las consecuencias, dado que pueden producirse hechos que aumenten los riesgos de quienes pueden llegar a ser afectados, con las consabidas consecuencias de tener que lamentarse pérdidas humanas, no solo en residentes sino también en inocentes transeúntes que pasen por donde esté un hecho en proceso.
Todo análisis de riesgo, cualquiera sea el ámbito de su aplicación, posee dos ejes de medición esenciales: "probabilidad de ocurrencia" e "impacto" (también denominado "extensión del daño"). De esta forma, y buscando simplificar la comprensión del texto al no hallarse destinado a profesionales de la seguridad, se han delineado consideraciones que hacen a los cuidados recomendables al morador de las propiedades horizontales:
1. Control de accesos: en lo referente al cuidado de terrazas, acceso primario (planta baja) y cocheras, ningún control de accesos puede descansar plenamente en la conducta aquí recomendada al usuario (inquilino o propietario), pues éste ignora el uso de los ingresos durante la jornada completa, no pudiendo determinar en todas las ocasiones si está frente a un potencial delito o una eventualidad corriente (por ej. reparación de una unidad funcional o espacios comunes, visitas de familiares de algún morador, etc.). Los edificios con Encargado corren con una ventaja, dado que estos conocen el movimiento total del mismo. Los moradores deben estar al tanto de toda alerta que pueda ser mal identificada como situación de riesgo (visitas, instalación de cable o teléfono, etc., comunicando a los vecinos del consorcio las novedades que pueden llegar a producirse en su unidad.
2. Control de residuos y correspondencia: Los residuos vertidos en la entrada del edificio o bien en canastos para éstos habilitados, suelen ser, en determinados horarios, según las zonas, revisados por recolectores de cartón y papel para reciclado, o alguna otra cosa de valor, quedando a la vista distintos objetos que pueden dar información, por ejemplo, la existencia de valores líquidos en una unidad funcional en particular, la condición de no hallarse habitada o de la residencia de personas mayores solas en ella, todos aspectos que hacen a la oportunidad del potencial ilícito. Por ello, debe tenerse especial cuidado con la basura, destruyendo resúmenes de tarjetas de crédito o cuentas bancarias, cédulas de notificación judiciales o administrativas que brinden detalles de identidad, o de quienes son los moradores de la unidad, fotografías, etc. La correspondencia, merece el mismo tipo de control que lo anterior, dentro de la misma atención, en la misma línea, procurando que se tenga un buzón en planta baja debidamente seguro, esto es, que impida la extracción de los papeles en él depositados por personas que no le corresponde.Continuará. Fuente:AIPH