Opiniones Ciudadanas:
Prevención del delito en la propiedad horizontal. Recomendaciones generales sobre medidas a tomar. Nota 2
Continuando con las notas referentes a los delitos en unidades de Propiedad Horizontal, trataremos en principio hoy lo referido a la iluminación y espacios ocultos o que permita ocultamiento de personas.
3) Condiciones lumínicas desfavorables: Los departamentos en altura pueden verse menos afectados por la situación a que éste punto se refiere, dada la dificultad de ver hacia su interior desde la vía pública. Los primeros pisos y la planta baja, han de guardar condiciones sobre ventanales, que impidan el paso de personas, dificultando el acceso a la unidad y una mayor intensidad lumínica en ellos, que si bien puede no lo evite en su totalidad, dificulte al menos la visibilidad hacia el interior del edificio y facilite la visión de quienes en él se hallen hacia el exterior. Es preferible evitar las luces blancas, dando tonos o efecto espejado a los cristales dándoles un mínimo ángulo (es decir, que no se hallen a 90º respecto del suelo), brindando así una mayor barrera visual. Es además necesario mencionar el uso de cortinas que acompañen estas mejoras de seguridad aconsejadas. Además, donde coincide la línea municipal con el lobby o acceso primario y/o secundario de entrada, deben instalarse luces en altura, por lo menos a un metro sobre el dintel, de manera que resulte fácil desde adentro mirar la entrada y evitar así que las luces internas formen un reflejo por cortina lumínica en la cara interior de los ventanales.
4) Puerta principal: Ningún sistema de cerramiento, seguro u análogo, puede impedir el forzamiento de la puerta; no existe el "riesgo 0", sino la minimización del riesgo. Dicho esto, tanto la estructura de la puerta como de sus puntos de anclaje; y la complejidad de mecanismo de cierre y apertura, quienes tienen por misión demorar la entrada forzada formando sólo parte de un sistema de seguridad. En los edificios es muy común el empleo de cristales blindados, para los cuales, más allá de su dureza, existen métodos para su rápida rotura. Pueden detonar o romperse parcialmente dependiendo de su laminado. Aquellas que poseen cristales pero su estructura es metálica, o son de madera con alma del mismo material, permiten la instalación de cerraduras eficaces, y su fraccionamiento es más difícil; sea de un material u otro, han de utilizarse sistemas de accionamiento sólo con llave, de esta manera, en el caso de las últimas puertas descriptas, aún roto el cristal el agente delictivo no podrá abrirla si no es con una llave o empleando un mayor grado de violencia que le aumentará el tiempo necesario de acceso llamando una mayor atención de los transeúntes u ocasionales testigos. Cabe mencionar que la existencia de puntos ciegos entre la distancia de la puerta y la línea municipal (escalinatas, rampas, etc.) favorece el accionar delictivo al servir como lugar de ocultamiento, ya que se pretenda atentar contra el edificio, sus moradores, o posibles víctimas que pasen, usando la entrada para ocultarse, hasta en el caso de la policía que los persiga. También es importante se otorgue mayor interés a la calidad de puertas empleadas en las unidades funcionales; en la actualidad, el grueso de los departamentos se encuentran muñidos de una simple puerta placa, cuya concepción es la de uso interior (para separar recintos dentro de una vivienda o instalación); más allá de la relevancia del factor costos, considérense puertas macizas para los departamentos, siempre y cuando no vaya esto en detrimento del plan de prevención de incendios y/o evacuación. Continuará. Fuente: AIPH.