Se habla de todo lo que no significa "gobernar" y nos olvidamos de la verdadera gestión de los legisladores frente a las necesidades del pueblo que los eligió.
¡Basta señores! El pueblo les paga para que dicten las leyes "necesarias" para lograr solucionar los problemas de las antiguas, y crear nuevas reglamentaciones para las actuales circunstancias que vive nuestro país, y no están contempladas en la legislación vigente. ¿Es posible que sea más importante discutir temas que no hacen al gobernar sino a la política partidaria? ¡Vayan más al Comité¡ El país no tiene solo problemas en su economía, sino también en todo lo que hace una sociedad, en todas sus actividades. Como puede ser que no sean reconocidos los gravísimos problemas existentes en educación, salud, seguridad y tantos otros. Estamos enfrentándonos a un momento crucial, del cual no podemos dejar de aprovechar lo bueno. Comienzan a darse condiciones en las cuales podrían estar la solución de los problemas que nos acosan. Debemos de una vez por todas no mirar para afuera de las fronteras, y adentrarnos en mirar hacia el interior de las mismas, para poner fin a las diferencias entre nosotros, para fortalecernos y entender que Argentina solo puede ser salvada por los argentinos. Sentir un poco de vergüenza ajena, cuando vemos que el mundo se asombra cuando ve que un país como el nuestro, con su dormida potencialidad por las enfermedades del odio y la discordia, se encuentra con su economía hundida en la ignorancia de quienes no saben sobrellevar su propia desidia y solo piensan en sus propias mezquindades sin buscar sacarle provecho a las riquezas con las que Dios bendijo a nuestras tierras. Por qué debemos seguir escuchando del mundo "Argentina tiene todo para volver a ser la potencia que otrora fuera", pero sus líderes no entienden el mensaje y siguen peleándose entre ellos. Tienen razón. Sintámonos nuevamente dentro del contexto de las naciones democráticas del mundo. Hemos perdido nuestro camino, pero ya se vislumbra el comienzo que debemos tomar, juntos como hermanos, crisol de razas, para finalmente volver a ser quienes una vez fuimos que es lo que necesita el mundo que seamos.
Pero no todas son sombras y tormentas. Debo destacar una acción realizada por un funcionario. A pocos días de asumir la nueva Dirección de Aduanas se realizaron dos hechos que da la esperanza que no todo está perdido. Se solucionó el problema increíble de la señora que no lograba retirar una silla para un discapacitado, es uno de ellos. El otro realizado esta vez en orden internacional, cuando se hizo llegar a El Salvador un suero que sirvió para salvar la vida de un niño de 6 años que había sido picado por una araña y allá no se fabricaba. A raíz de esto, se dio impulso a la oficina de atención especial para discapacitados. Esto es parte de la burocracia existente que socaba los cimientos de nuestra democracia, por la burocracia aduanera. Como se diría, "si se quiere, se puede". Felicitaciones.
Fuentes: Medios periodísticos.
