La escuela es para estudiar aprender y formarse. Pero las clases en CABA están suspendidas porque lo impiden el 5 % aprox. de los estudiantes en tomas "apoyadas por sus padres" ¡Increíble! ¿Y si les pasa algo? ¿a quién echarán la culpa?
Es una verdadera falta de respeto hacia las autoridades del colegio, y la sociedad misma, si no aprenden ahora, a respetar determinadas condiciones, ¿a qué edad lo harán?
¿Qué es esto de tomar el colegio porque no les gusta un sándwich? ¿Estos jóvenes, son los mismos que cortan las calles? ¿y dicen pertenecer a ideologías identificadas?
Pero los padres no son ajenos a esto, ¿Dónde estaban cuando se estaban criando estos jóvenes? así que, son tan o más responsables que sus hijos de estas conductas, también es una falta de respeto de los padres que admiten estas situaciones y no las corrigen, a la sociedad toda, porque existen los derechos, pero también, los límites y las obligaciones.
La permisividad, la falta de límites, nos ha llevado a esto. Que lejos quedó la frase de nuestros abuelos, "el respeto, la caridad y la educación, empiezan por casa".
En algunas escuelas secundarias y algunas facultades se pretende "educar" a los jóvenes en la militancia política, Y algunos docentes profundizan las ideas "revolucionarias" en los alumnos, apoyando y alentando el desorden.
Las consecuencias de todo esto se percibe cotidianamente en la sociedad que se deteriora cada día más, familias e instituciones que se desorganizan, y el país que desalienta las inversiones y por lo tanto la creación de nuevas fuentes de trabajos, y como resultado, seremos más pobres. Y así estamos, viviendo en un desorden absoluto.
Desde la creación misma se nos habla que el orden es inherente a crear, construir y mantener, así como el desorden a la destrucción. Es fácil destruir, lo difícil es construir.
Los padres somos responsables por nuestros hijos, y Dios nos sostiene como padres y nos enseña como ser buenos padres, en Su Palabra, La Biblia.
Nuestros hijos son la herencia del Señor. Ellos han sido confiados en nuestras manos como un préstamo por parte de Dios, para que los eduquemos según el consejo de Él. Por lo tanto, es nuestra mayor responsabilidad contribuir positivamente en el crecimiento y en la educación de nuestros hijos de acuerdo con la amonestación de Jesús en La Biblia, que es muy clara: "Dejad a los niños venir a mí, y no se lo impidáis; porque de los tales es el reino de los cielos" (Mateo 19: 14). … "Instruye al niño en su camino, y aun cuando fuere viejo no se apartará de él" (Proverbios 22: 6).
Se encuentra en nuestras manos el permitir, influir o no, que nuestros hijos tengan Valores Cristianos y se dirijan a Dios a través de Jesús, y nosotros, (porque la 1ª educación está en el hogar) los debemos formar con esos valores, y luego la escuela y la iglesia nos acompañará para ayudarnos. La familia, siendo la primera educadora, y "maestra", es quien delega luego en la escuela para que complemente la función educativa.
Ya es hora de que nosotros como cristianos levantemos en alto la bandera de la buena educación, la educación cristiana y el ejemplo, sin dudar de que es la mejor inversión, y el mejor testamento que podamos hacer a nuestros hijos alguna vez en la vida.
¿Existe algo más importante? ¿Estamos cumpliendo con nuestra responsabilidad?
Un día Dios nos preguntará; ¿Dónde estaban los Padres? ¿Dónde está el rebaño que te fue dado? (Jeremías 13:20). ¿qué le responderemos?
¿Quieres saber más del que puede ayudarnos a ser mejores padres, Jesús?
Búscalo a Jesús, búscalo a Dios, contáctate con un cristiano y/o una iglesia que enseñe de Cristo y La Palabra de Dios. "LA BIBLIA". ¡No te arrepentirás!
¡Dios te bendiga! ¡Hasta la próxima semana!
Luis Rodas
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