El gobernador Felipe Solá lanzó ayer el "Programa Guardapolvos" por el cual cooperativas de trabajo vinculadas a organizaciones sociales confeccionarán 200 mil prendas de ese tipo que serán entregadas por la Provincia a alumnos bonaerenses en el transcurso del ciclo lectivo 2006.
La iniciativa del Gobierno provincial –que dependerá de la Jefatura de Gabinete- incluye por el momento a 31 cooperativas que emplearán a cerca de 1.500 personas, aunque en la ceremonia se firmó un convenio marco para incorporar otras organizaciones a la confección y terminación de guardapolvos.
Al anunciar el programa –durante un acto que se realizó este mediodía en la Gobernación— Solá manifestó con este tipo de iniciativas se pone "al Estado al servicio de la inclusión", factor que consideró como "el objetivo más importante que tenemos, tanto en la provincia como en la Nación".
Consultado por la prensa sobre si se podría ampliar la cantidad de guardapolvos que confeccionarán estas cooperativas, el mandatario afirmó: "sí, en la medida que nosotros les demos trabajo y ellos puedan prosperar y ser cooperativas que se transformen en verdaderas empresas que siguen con el espíritu cooperativista, pero que empiecen a competir y tener mejor calidad y precios que otros".
Además, durante su discurso admitió que "este es un acto que me gustaría tener todos los días por el significado que tiene para el futuro" y que "el guardapolvo blanco iguala a todos los chicos en la escuela".
En ese marco, Solá se mostró duro con la controversia desatada por la adquisición del Estado de textos para entregar a los alumnos, al comentar que "no nos metimos en ningún negocio" y recordó que para la adquisición de esos manuales "hicimos una licitación" y que la compra del material de lectura y estudio era "lo mínimo que se podía hacer".
Del acto, participaron además el ministro de Desarrollo Humano, Jorge Varela; la Directora General de Cultura y Educación, Adriana Puiggrós y el Subsecretario de Coordinación de Políticas Públicas, Emilio Pérsico.