De hondo arraigo hispano, esta advocaciòn, originada en la aparición a San Pedro Nolasco (s.XII) cofundador de la orden religiosa de los mercedarios para rescate de cautivos cristianos en poder de los moros, llegò con los frailes mercedarios a nuestras tierras. Su patrocinio( mercedes= misericordias del Señor), se hizo ampliamente popular.
El General Belgrano, general del ejèrcito del norte, en las auras de la patria naciente confiò plenamente en la Santìsima Virgen y le invocò antes de sus batallas.
Este año, el bicentenario de la batalla de Tucumàn, la victoria patriota, recuerda uno de los hitos fundacionales de nuestra historia bajo el manto de la Santìsima Virgen, a cuya imagen en el convento mercedario de San Miguel de Tucumàn, el General Belgrano entregò su bastòn de mando y designò"generala" de su ejèrcito.
Prosiga la misma bendita Señora de las Mercedes, la B. V. Marìa, amparàndonos bajo sus ojos maternales, y que en este feriado, honremos a Manuel Belgrano y a los pròceres que nos dieron una patria generosa, y murieron pobres. Santa Marìa Madre de Dios, alcànzanos las "Mercedes" de Jesùs, fruto bendito de tu vientre.
NESTOR DANIEL VILLA